Novela de ficción histórica en la frontera
Trigueña por Juana Moriel-Payne
Reseñada por Xánath Caraza
Trigueña (Instituto
chihuahuense de la cultura, 2013) de Juana Moriel-Payne es una novela histórica donde conocemos sobre la vida de Juana de Cobos en el
norte de un México de los 1700´s, un lugar de tarahumaras, apaches, mestizos,
mulatos y europeos. Moriel-Payne nos
lleva de la mano por calles de pueblos por construirse, ilusiones de niña, que
en el hacer pan ve una razón para vivir y subsistir. Con escenas casi cinematográficas Moriel-Payne
nos muestra la historia del norte de México, nos lleva de viaje en carreta, por
un microcosmos, de ida y vuelta.
Descubrimos una heroína de carne y hueso entre las páginas de Trigueña, una niña que se convierte en
mujer, con retos, personales y económicos, a los que se sobrepone y que también
crea espacios públicos, un consultorio médico y una casa para mujeres, para beneficio
de la sociedad donde vive, la actual frontera entre México y los Estados
Unidos.
Trigueña con sus secuencias analépticas nos compenetra en
los recuerdos de los personajes que vivieron con Juana de Cobos, y es así cómo
descubrimos su vida y, de paso, aprendemos sobre ese México de los 1700´s, de
un norte colonial en plena vía de desarrollo.
La novela
combina, capítulos con visiones retrospectivas de los múltiples personajes,
analépticas, con capítulos que están en el tiempo presente de la novela. Ese juego de tiempos crea una acertada dinámica,
despierta la atención en el lector; y logra un dejar pasar las páginas fluido y
sin detenerse, mezclado con aromas, texturas, sabores y color.
“Todo de negro, el viejo Gregorio encabezó la
procesión. Y un poco para mostrar su
valor y un mucho para quitarse de encima los escalofríos, iba dando tragos a
pico de botella del aguardiente que circulaba de mano en mano. El sonar de sus pasos sobre la tierra
escarchada seguía el ritmo de los cuchicheos que entre vahos le preguntaban por
el cuerpo de la difunta.” ( p. 11)
“Vio surgir el calor de las brasas que se encendían
y se apagaban como siguiendo el ritmo de una respiración sin prisa que a la vez
sugería una promesa de retorno. Poco a
poco observó cómo las hogazas se iban esponjando, dorando y despidiendo un leve
olor que en ese momento asoció con el regazo de su madre y así, con la mirada
perdida en el horno y la mente entretenida en sus años de infancia, el aroma a
pan recién horneado invadió su nariz, su estómago y la mañana.” (p. 16)
La diversidad
de México colonial está presente en Trigueña,
tarahumaras, apaches, mestizos, mulatos y otros europeos son protagonistas de
las páginas.
“Las mujeres encendían los fogones y preparaban el
desayuno para despachar a sus maridos e hijos a labrar la tierra con la barriga
llena, aunque en casa de Juana aquello ocurría un poco diferente. Su madre no se ocupaba de la cocina, ni ella
tampoco. Lo hacía Manuela, una
tarahumara que su padre empleó para que acabara de criarle a los chamacos y, de
cuando en cuando, le aliviara las necesidades propias de los hombres, después
de que su madre perdiera por completo la cordura…” (p. 21)
““¡Qué costumbres tan raras!”, pensaba Juana y lo
afirmaba las veces que iban de paseo a la plaza. Todas las personas estaban revueltas: indios
platicando con españoles, españoles del brazo de mulatas, indias abrazadas a
españoles…todo un relajo, un desorden…” (p. 199)
El desarrollo psicológico de la protagonista, Juana de Cobos, lo seguimos en diferentes partes de Trigueña,
la vemos crecer de niña a mujer, de mujer a esposa, de esposa a viuda y
finalmente convertirse en una mujer sola e independiente.
“Juana se acostó a dormir junto a su madre dándole
la espalda a la abuela, pero no podía conciliar el sueño. Con los ojos cerrados repasaba la escena del
beso que le dio Eladio y cuando una y mil veces trató de acomodarle el bigote
para que no le picara en los cachetes al besarla.” (p. 38)
“Juana regresó a su casa con Gregorio y conforme
pasaron los días fue haciéndose a la idea de que ahora sí era viuda, aunque
sólo ella y su hijo lo sabían y aún así, no pudieran comentarlo ni siquiera
entre ellos.” (p. 143)
“¿En qué pensaba?
En Majalca, en sus palabras: “Ojos luminosos”, “Lo que me dice con la
mirada”…apagó la vela y se dejó caer sobre la cama. Al levantar la frazada el chal de seda
resbaló por sus piernas y al sentir la suavidad de la tela, pasó una y otra vez
el chal por todo su cuerpo hasta rendirse y quedar profundamente dormida.” (p.
116)
Juana de Cobos, protagonista de Trigueña,
finalmente sola, se da cuenta de las necesidades del pueblo donde vive. A manera de activista social y visionaria,
organiza a la gente a su alrededor y logra llevar el primer médico al
pueblo. Así mismo solicita, al municipio,
que mujeres recién salidas de la cárcel trabajen con ella en su panadería e
igualmente residan ahí, a manera de entrenamiento y lugar de transición, para,
después de un tiempo, ser reincorporadas a la sociedad.
“En pocas palabras, Juana ofreció su casa y su
negocio para dar recogimiento a las mujeres de la villa. Antes de que la interrumpieran le hizo ver al
alcalde que San Felipe el Real no contaba con lugares decentes para alojar a
mujeres que hubieran cometido algún delito menor, fueran abandonadas,
estuvieran recuperándose de algún mal o, en general, tuvieran necesidad de un
techo digno donde pudieran asearse, comer…y, lo más importante, aprender algún
oficio para que rehicieran sus vidas.” (p.
214)
Trigueña, novela de ficción histórica, escrita con gran precisión donde
viajamos en el tiempo con Juana de Cobos y otros personajes en el norte de un
México colonial. No es sorpresa que la
novela haya recibido el premio, 43 Southwest Book Award por The Border Regional
Library Association-BRLA en 2013.
Novelista e historiadora, Juana Moriel-Payne |
Juana Moriel-Payne is from Ciudad Juárez, Chihuahua. She lives in El
Paso with her husband John Payne and three beautiful dogs. Trigueña is
her first published novel, and a wining prize of "Publicaciones
2012", a literary contest organized by the Instituto Chihuahuense de la
Cultura (ICHICULT). Trigueña also received the BRLA Southwest Book
Awards 2013. She has an unpublished novel La caza del venado, and is
looking for a publisher. Sometimes she thinks she can be a poet and writes
poems. "Culpas", a set of four poems that resume the history of women
living in the desert-frontier will be published in August by Cuadernos
Fronteizos (UACJ). Right now she is Ph. D. candidate for Borderlands
History Program at the University of Texas at El Paso. She has published her
research findings in history-social reviews in Latin America and United States.
Her dissertation analyzes the colonial festivities in San Joseph del Parral,
Chihuahua. She is doing research and writing, meanwhile in her mind she is
creating a second historical novel about a mulata named Antonia.
Moriel's novel is truly a wonderful historical rendition of old Mexico, with vivid unforgettable characters. I truly enjoyed this novel, and I'm glad you posted this review as it touches upon the importance of literature in la frontera, and the emergence of such important writers as Moriel. --M. Miranda Maloney
ReplyDeleteThank you dear M Miranda Malonely, I really appreciate your thoughts about my novel. And thank you for your support.
DeleteAs an author of commercial contemporary novel set mostly in Mexico (including in Chihuahua) I'm interested in all fiction set in Mexico. I wonder if this novel is also written in English. Thanks and best wishes to the author.
ReplyDeleteMy husband and I are working on the translation of the novel into English. Hope I can find in the future an Editor to publish it in USA.
DeleteThank you
I have been looking for this book since it’s one of my favorites, as of right now it’s out of stock in Amazon. Where can I get it?
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